ENSEÑANZA DE LA FÍSICA Y LA QUÍMICA
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TEMAS DE FÍSICA Y QUÍMICA |
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EL MODELO ATÓMICO
DE BOHR EN SU PUNTO JUSTO La
mayoría de los textos de Química enfocan el modelo del átomo de Bohr,
sin que sus autores vayan a la fuente original, esto es los trabajos
que Bohr publicó en junio, septiembre y noviembre de 1913, sobre la
constitución de átomos y moléculas, en el Philosophical Magazine. Si
los hubieran leído, estoy plenamente seguro que no pondrían en boca de Bohr, cosas que él
jamás estableció. Lo que ocurre que es cada autor toma como base lo
escrito por otro y así sucesivamente sin ir a las fuentes. Voy
a intentar reducir y comentar el artículo que Niels
Bohr envió a la revista citada el 5 de abril de 1913, base de toda su
teoría. El
artículo consta de cinco partes. Una introducción. Consideraciones generales:
Unión de electrones por núcleos positivos. Emisión de espectros de rayas.
Continuación de consideraciones generales y Estado permanente de un
sistema atómico. En
el enfoque que hace parte del modelo de Rutherford, su maestro en Mánchester,
al que anticipó el borrador del trabajo el año anterior. Sitúa
al electrón de carga –e, y masa m, describiendo órbitas elípticas cuyo
eje mayor es 2a con una frecuencia de revolución T, alrededor de un núcleo con carga E, y con
masa mucho mayor que la del electrón, cuya velocidad a su vez es muy
pequeña comparada con la de la luz. Supone
que en principio no hay radiación de energía y que el electrón describirá
órbitas elípticas estacionarias. La frecuencia de revolución
T,
y el eje mayor de la órbita 2a dependerán de la cantidad de energía
W que debe suministrarse al sistema para alejar al electrón una distancia
infinitamente grande del núcleo. Al
aplicar el equilibrio de fuerzas llega a la conclusión
(tomada de trabajos de Rutherford y colaboradores) que:
Ahora es cuando empieza el trabajo más o menos original de Bohr [2] . Dice Bohr: “
Tomemos ahora el efecto de la radiación de la energía calculado de la forma habitual
a partir de la aceleración del electrón. En este caso el electrón ya
no describirá órbitas estacionarias. W aumentará continuamente y el electrón se aproximará al núcleo describiendo
órbitas de dimensiones cada vez mas pequeñas y con frecuencia cada vez
mayor; por término medio el electrón
gana energía cinética al mismo tiempo que todo el sistema pierde energía.
El proceso continuará hasta que las dimensiones de la órbita sean de
la misma magnitud que las dimensiones del electrón o del núcleo. Un cálculo sencillo muestra que la energía radiada durante el proceso
será muy grande comparada con la que se desprende en los procesos moleculares
normales. Parece obvio que este comportamiento es muy distinto del de
un sistema atómico natural. En primer lugar los
átomos reales en su estado permanente parecen tener dimensiones y frecuencias
fijas. Además si consideramos cualquier proceso molecular, el resultado
parece ser que después de desprender cierta energía, característica
de cada sistema, este alcanza un nuevo estado de equilibrio, en el cual
las distancias tienen el mismo orden de magnitud que antes del proceso”. Ahora expondrá la clave de toda su teoría, basado en la teoría de Planck. “Según la teoría de
la radiación de Planck, la radiación de energía por un sistema atómico
no tiene lugar de forma continua admitida en la electrodinámica usual,
sino por el contrario se produce en emisiones discontinuas, siendo la
cantidad de energía emitida en una sola emisión por un vibrador atómico
de frecuencia < igual a JhL, siendo J un número entero y h una constante universal. Volviendo al caso simple de un electrón y un núcleo positivo. Inicialmente
aquél estaba muy separado y no tenía velocidad apreciable respecto al
núcleo. Supongamos que después de producirse la interacción, entró en
una órbita estacionaria respecto al núcleo. Admitiremos por motivos
a los que nos referiremos más tarde que la órbita en cuestión es circular.
Supongamos que durante la interacción se emite una radiación de frecuencia
L
igual a la mitad de la frecuencia de revolución T en su órbita final,
entonces de acuerdo con la teoría de Planck cabría esperar que la cantidad
de energía emitida en el proceso fuera
JhL. Admitiendo que la radiación emitida sea homogénea, la segunda hipótesis
respecto a la frecuencia de radiación, es consecuente, ya que la frecuencia
de revolución al inicio de la emisión es 0. Por lo tanto que
al aplicarlas a las expresiones anteriores elevando al cuadrado como sustituyendo en la expresión: simplificando y despejando y como llevando a esta expresión el valor obtenido de W, quedaría: haciendo en las expresiones anteriores e=E = 4,7.10-10 ; e/m = 5,31.1017 y
h = 6,5.10-27, se obtiene: 2 a = 1,1. 10-8
cm; T= 6,2.1015 ( 1/s ) y W/e
=13 volt
[3]
Valores que son del orden de magnitud de las dimensiones lineales de los
átomos, las frecuencias ópticas y los potenciales de ionización. La parte segunda del artículo
hace referencia al espectro del hidrógeno, y la explicación de las series
de Balmer y Paschen. “Si hacemos E = e,
la expresión de la energía emitida al formarse un estado estacionario
es y la cantidad de energía emitida por el paso del sistema de un estado correspondiente a J =J1 , a otro correspondiente a J2 , será : Si suponemos que la radiación es homogénea y que la cantidad de energía
emitida es h<,
siendo <
la frecuencia de la radiación, obtendremos :
de lo que expresión
que constituye la ley que relaciona las rayas del espectro del hidrógeno.
Si hacemos J2
= 2, obtenemos la serie de Balmer. Si J2
= 3, obtendremos la serie observada por Paschen en la región infrarroja.
Escribiendo J2
= 1 y J2
= 4, 5 ... obtendremos series situadas en el
extremo ultravioleta e infrarrojo , no observadas pero cuya existencia
debe esperarse. La concordancia no es solo cualitativa sino también cuantitativa. Haciendo e=4,7.10-10 ; e/m=5,31.1017 y h=6,5.10-27, obtendremos El valor experimental observado para este factor es 3,290.1015” La tercera parte del artículo, hace referencia a las consideraciones generales y enuncia de otra forma sus ideas “....Representando
por M el momento angular del electrón en torno al núcleo, y para una
órbita circular, siendo T
la frecuencia de revolución y T la energía cinética del electrón. Además
T = W, como por lo que se obtiene que
Si hacemos se tendrá que Por consiguiente si postulamos que la órbita del electrón es circular
en los estados estacionarios, se puede expresar que el momento angular
del electrón en torno al núcleo en un estado estacionario del sistema,
es un múltiplo entero de un valor universal independiente de la carga
del núcleo. La posible importancia del momento angular en la discusión
de los sistemas atómicos en relación con la teoría de Planck, es destacada
por Nicholson.”. El capítulo cuarto hace referencia a la absorción de radiación, y no vamos a entrar en él. El capítulo quinto y último hace referencia al estado permanente de un sistema atómico En él se generalizan al final las hipótesis mencionadas con el siguiente texto: “En cualquier sistema
molecular formado por núcleos positivos y electrones, en el cual los
núcleos están en reposo unos relativamente a los otros y en el cual
los electrones se mueven en órbitas circulares, el momento angular de
cada electrón en torno del centro de su órbita será en el estado permanente
del sistema igual a h/ 2B, siendo h la constante de Planck”
[4]
.
[1]
[2]
El
primero al que se le ocurrió aplicar la teoría de Planck al átomo,
fue a Arthur Eric Haas,
estudiante de doctorado de la universidad de Viena, en
1910, refiriéndolo al modelo de Thomson
y generando la expresión hL= e2/a. Lo llevó a la conferencia Solvay
de 1911, donde lo leyó Nicholson, astrónomo
de Oxford que andaba buscando una forma de explicar los espectros
de la luz procedentes de la corona solar, donde había identificado
a dos nuevos elementos el protoflúor y el nebulio.
Nicholson cuantificó en 1912, el momento angular del electrón L=n(h/2B). Bohr se inspiró en los trabajos
de Nicholson, como así lo reconoce en este
artículo.
[3]
Thomson en 1911, había calculado experimentalmente
el potencial de ionización del hidrógeno, dando un valor de 11 voltios.
[4]
Este trabajo de Bohr consta de
36 páginas, y en el resumen que se reseña se ha destacado lo más importante,
referido a lo que se enseña sobre
la teoría de Bohr en la Química
de Enseñanza Secundaria y Bachillerato, en ninguno de los cuales se
hace referencia a la hipótesis fundamental
o sea que la frecuencia de radiación es la mitad de la frecuencia
de revolución. |
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