ENSEÑANZA DE LA FÍSICA Y LA QUÍMICA
Stock en Breslau
Alfred
Stock
Posiblemente los estudiantes de enseñanzas medias, han oído hablar de Stock, cuando comienzan a aprender la formulación química. “Ya no se dice cloruro férrico, sino cloruro de hierro(III); es la nomenclatura Stock”, le dicen en sus clases de química. Sin embargo, este científico alemán, que vivió a caballo de los siglos XIX y XX, que sufrió en sus carnes dos guerras mundiales, que peleó para que no se destruyera la química alemana [1] , no solo contribuyó a la enseñanza de esta disciplina, aislando hidruros de boro y creando el término ligando, sino durante los últimos 20 años de su vida, se dedicó a estudiar su enfermedad degenerativa que bautizó como micromercurialismo, dado la pauta a la medicina de la peligrosidad de los envenenamientos con mercurio.
Stock en Berlín
Nace el domingo 16 de julio de
1876, en Danzig, actualmente en Polonia. Hijo de un funcionario de seguros,
Hugo Stock y de su esposa Hildegard. A los dos años,
a su padre le trasladaron a Berlín,
donde comenzará su formación en el gymsasium,
matriculándose a los 18 años en la universidad de Berlín, donde durante 8
semestre estudió química con el profesor Emil Fischer, en su instituto de Química, y por lo tanto dedicándose a la Orgánica.
A los 23 años defendió su tesis
doctoral, en mayo de 1899, y a partir de aquí se dedicará a la química
inorgánica
[2]
.
Todavía en 1899, Fischer enviará a su nuevo ayudante recién doctorado a París,
para que trabajara con Moissan en el campo de la
química inorgánica
[3]
. Con Moissan se dedicó a sintetizar, compuestos de boro y de
silicio, empleando un baño de mercurio
[4]
.
Al año siguiente vuelve a Berlín [5] , al nuevo edificio del instituto de Química de Fischer.Encargado de la investigación inorgánica, trabaja con derivados del fósforo , arsénico y antimonio, con hidrógeno, azufre y nitrógeno, publicando cerca de 60 trabajos, desarrollando la llamada “técnica de alto vacío de Stock” [6] . En 1904, fue nombrado Privatdozent [7] , junto a Otto Diels, y dos años después publica: “Praktikum der cuantitativen anorganischen Analizar” , un tratado de análisis inorgánico que sería traducido a diferentes idiomas.
Stock en Karlsruhe
En 1907, comienza a construirse
en Breslau, un instituto de química inorgánica, y el
ministro de Prusia de cultura, le ofrece el cargo de catedrático
[8]
a Stock, que se trasladará a Breslau dos años
después, dejando Berlín. En octubre de 1910, se abre el instituto de Breslau, y un mes después lo inaugura el káiser. En los
siete años que estará en Breslau, se dedica a
estudiar los hidruros de boro, su investigación mas conocida. Así , descubre el B4H10 líquido, por
descomposición de boruro de magnesio con ácido clorhídrico, y a partir de éste
del B2H6 (diborano) que es
gaseoso. También estudia la formación de carburos de no metales como el C3S2, CSSe, CSTe
[9]
.La
primera guerra mundial interrumpe sus investigaciones.
Las investigaciones continuarán
en Berlín, en el Instituto Kaiser Guillermo, a donde
se traslada en 1915, sucediendo a Willstätter, que
había dejado la cátedra vacante para irse a Munich. Este
traslado le supuso una notable mejora económica. No sólo se dedicará a los
hidruros de boro, sino también a los de silicio y boro. En un trabajo publicado
el 26 de noviembre de 1916, sobre las propiedades del hidruro de silicio,
aparece por vez primera el término ligando, aunque fuera del contexto de la
química de la coordinación
[10]
.
En 1919, en modifica la nomenclatura inorgánica, creando el “sistema de archivo o de inventario”, para sustituir a la de Lavoisier, de los diferentes sufijos, con la idea de simplificarla al máximo. La idea original de separar con un guión las dos partes de la fórmula que empleaba números arábigos, se modificó en 1924 y posteriormente en 1929, sustituyéndola por números romanos, y así surgirá el cloruro de hierro(III), para sustituir al cloruro férrico.
En 1921, obtiene por primera
vez berilio, por electrólisis, del fluoruro de berilio y sodio, procedimiento
que permitió abaratar su producción y hacerlo en escala industrial.
En Berlín había retomado sus
investigaciones sobre los hidruros de boro, obteniendo el B5H9,
B5H11, B10H14, empleando su técnica
de alto vacío. Sin embargo tenía un inconveniente añadido y es que su
laboratorio en Berlín estaba pésimamente ventilado, comenzando a sentir los
síntomas de intoxicación
[11]
.
Una vez que reconoció en 1924, estar intoxicado por
vapores de mercurio
[12]
,
comenzó estudiarlo, combatiendo todas las posibles causas en todos los aspectos
vitales donde se pudiera usar, así escribió una monografía sobre el uso de los
peligros del uso de amalgamas de cobre
en los empastes dentales.
En 1926, con 50 años, se
traslada a Karlsruhe, intentando mejorar su salud,
aunque lo único que hizo fue mejorar su técnica de alto vacio. Al ser elegido
presidente de la sociedad química alemana, se dedicará a dar charlas por
diferentes países, y a estudiar su enfermedad, experimentando con conejos, la
forma de combatirla. A los 60 años, se retira, aunque como profesor emérito de
la universidad de Berlín acepta dirigir una investigación sobre el
envenenamiento con mercurio
[13]
.
[1]
Era el presidente de la Sociedad química alemana.
[2]
Junto con él defendió la tesis Otto Ruff, cinco años mayor, el cual mas tarde en la plenitud de
su carrera diría:”Sólo conozco dos
importantes químicos inorgánicos alemanes; el otro es Alfred Stock”.
[3]
Moissan con 47 años había reunido en París a un grupo de
científicos, en torno a unas instalaciones muy modernas, en las que hacían uso
de un nuevo horno eléctrico.
[4]
Ahí fue donde empezó su envenenamiento con este
metal.
[5]
El cambio supuso un pequeño trauma para Stock, con
24 años, cambiando la bulliciosa Paris, por la tristona y laboriosa Berlín.
[6]
Esta
técnica acentuó su envenenamiento por mercurio, que es volátil a baja presión.
[7]
El cargo llevaba adjunto un aumento de sueldo lo
que le permitió casarse con Clara Venzky, que había
sido muy amiga en épocas infantiles, con la cual tendrá dos hijas: Hildegard y Úrsula.
[8]
El cargo llevaba implícito un sueldo anual de 6000
marcos.
[9]
La manipulación de este
último compuesto y la inhalación de sus vapores, produjo que Stock y sus
ayudantes, tuvieran un aliento con olor a ajo durante varios días.
[10]
El término aparece en el pie de página del trabajo
y en el contexto de explicar la afinidad entre un elemento y otro u otros que
se unen (ligandos,
del latín ligare), a través de la valencia que era la unidad de fuerza por la
que los ligandos con signos contrarios se unen. El
término no lo vuelve a emplear Stock en ninguno de sus trabajos posteriores, y
tampoco Werner en sus trabajos
posteriores sobre química de la coordinación, ni tampoco en las reglas sobre
nomenclatura inorgánica formuladas por la comisión alemana, encabezada por el
propio Stock, donde se formulan las bases de la nomenclatura Stock. Desde 1927,
el término ligando comienza a surgir en la literatura química alemana,
generalizándose en 1930. La IUPAC comienza a estudiar la posibilidad de
introducir el término, que se normaliza en el congreso de Roma de 1938.
[11]
Aunque notaba cansancio y fatiga, él no lo achacó
a intoxicación hasta que un ayudante suyo, en 1924, enfermó de gravedad
reconociéndose debido a la inhalación continua de vapores de mercurio. A partir
de este momento comenzará a estudiar su enfermedad. Posteriormente lo contará
en el trabajo “Die Gefaehrlichkeit des Quecsilberdampfes”, publicado en 1926:” Desde mediados de
1923, dos de mis colegas, un asistente y un invitado español, estaban
trabajando en las medidas de densidad de gas, que requieren mantener una
temperatura constante, y por esta razón mantienen las ventanas y puertas
cerradas, si es posible. El trabajo que había que hacerlo en la primavera de
1924, ya que mi asistente quería entrar en la industria, y el colega español
quería volver a casa. El trabajo se realizó a toda prisa por lo que nuestra
limpieza normalmente escrupulosa, sufrió en cada habitación. Gran parte del
mercurio derramado se encontraba bajo
trípodes, en grietas y rendijas entre las tablas del suelo y en las mesas. Mi asistente
se enfermó, no sólo con los dolores de cabeza, fatiga mental, etc, sino también con fuerte deterioro corporal, con
abscesos dentales. Su hermano, un médico sospechó que el complejo de síntomas
se debía a una intoxicación por mercurio”.
Después se vio que todos estábamos envenenados por mercurio, envenenamiento
cuyos síntomas aparecían mas tarde. Lo explica así: “Sin embargo, se
necesita mucho tiempo después de la inhalación de aire que contiene mercurio
antes de la intoxicación se hace evidente. Para uno o más años, los signos
pueden estar limitadas a la fatiga y lentitud disminución de rendimiento mental
y la memoria. Así, el colega español ya se ha mencionado, por ejemplo, mostraba
signos externos de inflamación de la cavidad oral sólo muy al final del año se
quedó en nuestro laboratorio. Los síntomas llegaron a su clímax meses después
de habernos dejado, y después de que él se retiró de la influencia de mercurio.
Se había dado cuenta de los efectos mentales mucho antes sin poder explicar la
causa. "Para mí, fue", dijo, "como si me estaba poniendo más
tontos y más tontos en Alemania."
[12] El problema de los vapores de mercurio, estriba en la capacidad de éste para metilarse, penetrar a través de las paredes celulares, atacando a la mayoría de los enzimas, con un componente de azufre, debido a la estabilidad del enlace S-Hg, sustituyendo al H, en los enlaces S-H. Así ataca al sistema nervioso produciendo parálisis y trastornos cerebrales.
[13]
En su despedida, y visto las aclamaciones y
honores, de sus colegas y discípulos dijo” Pero por favor estoy casi
sintiéndome como Max Schemeling” (refiriéndose a
un conocido y aclamado campeón mundial de boxeo alemán, que físicamente en nada
se parecía a él).
[14] Stock era un químico de laboratorio, y sin instrumental, se sentía desvalido. Siempre se preocupó muy poco de justificar lo que descubría, con teorías que no valoraba demasiado. Decía: "El valor de las teorías no debe ser sobrestimada, aunque parece muy atractivo y dar satisfacción intelectual. Muy a menudo, sólo es una caja de vino viejo en odres nuevos ". Nunca mostró ningún deseo para la utilización práctica de sus descubrimientos, y la mera idea de que, por ejemplo, del uso de boranos como propulsores de cohetes, le había parecido absurda. "El valor de un nuevo e importante hecho científico tiene la misma relación a la investigación aplicada como el descubrimiento de un valioso yacimiento para su explotación ", dijo una vez
[15]
Realmente a Stock, le había tocado la tarea de
reconstruir la química alemana después de la primera mundial, y sabía el
trabajo que suponía. Además había sido de los pocos químicos alemanes que se
habían quedado en su patria.
[16]
“Sólo he conseguido salvar un resumen de mis
publicaciones completas juntos con algunas notas biográficas en mi cartera. Mi
esposa y yo enviamos nuestros mejores deseos a usted, mi querido amigo, y a su
esposa. Suyo, Stock”.
En Berlín, y para la tarea encomendada, monta dos laboratorios; el primero en el Reichsgesundheitsamt, y el segundo en el Instituto Kaiser Guillermo, en el departamento de Química Física, con dos asistentes femeninos, que le ayudarán a realizar el informe final sobre ese tema en 1943. Antes había sido operado de garganta, sin mucho éxito, dado que se trataba de un efecto secundario por el envenenamiento con mercurio.
En el año 1943, sus laboratorios
se cierran , porque había usarlos en la maquinaria alemana de guerra, así que
se traslada con su esposa a Bad Warmbrunn,
en Silesia. Solo estará allí 18 meses, porque el acercamiento del frente ruso,
hacía peligrosa su estancia. Se marchará a Dassau,
junto al Elba, en la casa de un compañero, a donde llegará exhausto, ya muy
debilitado por su enfermedad. Unos días mas tarde,
dicha ciudad será bombardeada, perdiendo todo su equipaje, con todas sus
investigaciones; sólo salvó un pequeño maletín. Se refugia en una pequeña
cabaña en Aken; Dassau había caído en manos rusas.
En Aken y con casi 70 años, sin ningún medio, se refugia en la pintura a la acuarela,
dedicándose a pintar naturalezas muertas, y todos los objetos que contenía su
cabaña
[14]
.
Todavía en enero de 1946, dará
una conferencia sobre la química del boro. El último mensaje que traslado fue:”¡¡Salvar
la química alemana!!”
[15]
.
Tres semanas antes de morir, envió una carta su amigo y discípulo el profesor Wiberg, con todos los trabajos que había conseguido salvar
[16]
.
Fallece en la madrugada del 12 de agosto de 1946.